Todo el mundo necesita alguien que lo vigile

Está muy de moda ahora la historia del robo de los famosos “Carros del Mercadona” por el Sindicato Andaluz de Trabajadores capitaneados por el Diputado de Izquierda Unida, Jose Manuel Sanchez Gordillo, y veo muchas comparaciones entre ese delito y el delito de los banqueros, de los especuladores, de los Urdangarines, caso de los EREs, etc…

Existe por ello ahora el conflicto moral de porqué a unos que sólo roban unos cuantos carros de comida para dárselo a los pobres los quieren meter en la cárcel y a otros que roban millones de €uros pasean impunemente por las calles y se van de vacaciones tan tranquilos.

 

Tanto unos como otros son delitos al fin y al cabo, por lo menos en el sistema democrático donde vivimos que ha legislado supuestamente para que sean responsables tanto unos como otros, cada uno con su diferente graduación, otra cosa es que se vulnere éste y que unos queden impunes y otros no, ahí radica un grave problema. Quizás no esté la legislación bien hecha o quizás, quienes la redactan, o los que las juzgan y hacen ejecutar las sentencias no les conviene, o simplemente no tienen a nadie que les supervise.

 

Ahí está el meollo de la cuestión, no tenemos en este país la cultura de la evaluación, de la medición del trabajo o la productividad, de vigilar, de observar y supervisar si las cosas se hacen bien y sino, responsabilizar a quién las hace mal.

 

A ver si me explico. La culpa es de la no vigilancia a quién manda. El problema es que los dirigentes de las instituciones no son juzgados nunca o casi nunca puesto que a ellos, al estar en la cúspide, no existe quién les controle, y hacen lo que quieren sin miedo a tener que responsabilizarse si las cosas salen mal, ya lo pagarán otros. Básicamente es eso, debe de ser eso, no queda otra explicación.

 

Para poner un ejemplo, en este país, en la elección de dirigentes de consejos de administración de bancos, o presidentes de altas instituciones del Estado, o de Tribunales, hay una irregularidad bastante palpable. ¿Cuál? Pues que son elegidos por los partidos políticos, acorde a la conveniencia de quién esté en ese momento en el Gobierno, si usted como partido “X”, tiene mayoría absoluta, usted colocará a quién más le convenga en lo más alto de las instituciones que supuestamente representan al pueblo, o a las que deben de cuidar del dinero del pueblo. O sea, una pantomima.

 

Por ello esas elecciones deberían permitir tener evaluaciones y supervisiones de expertos, al igual que el trabajo de éstas personalidades. Es totalmente coherente que si un trabajo con una responsabilidad importantísima, pueda ser vigilado por grupos de expertos en la materia para que no ocurran cosas como las que nos cuentan todos los días ¿no?

 

Ahora viene una cuestión más, quizás pueda pensar alguien, pero coño, si me están vigilando en cada momento, presionando, no tengo la suficiente libertad para trabajar de la mejor forma que sé, o de hacer el trabajo de forma adecuada porque me siento observado. Pues señor, es necesario. No está siendo vigilado, está siendo supervisado por un grupo de expertos para que si por casualidad usted fallara, no ocurran males mayores.

 

Es como lo de los funcionarios, estamos hartos de escuchar que son el mayor problema del país, que hay muchos, que sobran. Pero sin embargo existen barbaridad de expedientes acumulados, procesos administrativos sin tramitar, hospitales llenos de enfermos, clases en los colegios e institutos llenas, y se están pasando de curso a niños sin que puedan tener un profesor al lado para enseñarles lo que debieron aprender el curso anterior.

 

Con una evaluación correcta y una supervisión, en todos y cada uno de los escalones de la jerarquía, podríamos evitarnos éste tipo de problemas.

 

No por pura vigilancia, sino por precaución y supervisión del trabajo, y como solución a uno de los mayores problemas que pienso que existen en nuestro país (llámalo corrupción, llámalo conformismo, llámalo aprovechamiento, llámalo como quieras) que no se aboga por evitar el problema sino por intentar solucionarlo una vez que ya ha ocurrido.

 

Por ello y para cambiar esto, todo el mundo necesita alguien que lo vigile.